El Shelly Sensor de Movimiento es un dispositivo inalámbrico diseñado para detectar movimientos en su entorno. Con una altura de 85 mm y una profundidad de 36 mm, este sensor funciona con batería y tiene una duración estimada de hasta tres años gracias a su capacidad de batería de 6500 mAh.

Este producto cuenta con tecnología inalámbrica que opera en la frecuencia entre los 2400 - 2484 MHz, lo que permite transmitir información a distancias considerables sin necesidad de cables o conexiones físicas. Además, el color del producto es blanco y viene empaquetado individualmente.

La distancia máxima recomendada para la transmisión del sensor es de aproximadamente 50 metros, lo cual puede variar dependiendo del ambiente donde se utilice. El intervalo óptimo para operar el dispositivo está comprendido entre los cero grados Celsius (0 °C) y cuarenta grados Celsius (40 °C).

En resumen, el Shelly Sensor de Movimiento ofrece una solución práctica e innovadora para monitorear áreas específicas dentro del hogar u oficina mediante detección automática por movimiento. Su diseño compacto y alimentación por baterías hacen posible instalarlo fácilmente en cualquier lugar sin requerir conexión eléctrica directa ni instalaciones complicadas.